El programa principal que se realiza durante todo el año por parte de la fisioterapeuta es el programa de intervención física. Este programa lleva realizándose desde hace más de 10 años siendo la intervención más relevante desde este área.
La vejez no es una enfermedad, aunque sí es sabido que las personas de esta edad están sometidos a menudo a síndromes invalidantes, de los cuales hay que diferenciar entre los procesos que se favorecen de la vejez biológica de los que resultan de una vejez patológica. Estos síndromes invalidantes son los que la fisioterapia trata de compensar; ya que la presencia de enfermedades se da en el anciano con mayor facilidad y frecuencia que en el individuo joven. Todo esto contribuye a una pérdida de la independencia y a una reducción en la calidad de vida de las personas.
El aumento del índice de vida hace que este perfil de personas sea cada vez más numeroso, y de este modo las adaptaciones y la actuación de los fisioterapeutas sea cada vez más importantes y necesarias en el día a día para facilitar la consecución o mejora de sus aptitudes funcionales, psicológicas y psicomotrices de cada uno, en su día a día.
Es importante señalar que tratar a un adulto mayor no supone curarlo de su proceso crónico, sino simplemente mejorar su capacidad funcional y social con el objetivo de mejorar su calidad de vida.